Amalgama de puzles para un entretenimiento único
Aprovechamos el lanzamiento en PSP de Bliss Island para redescubrir uno de esos juegos que poco a poco han ido conquistando los corazones de los jugadores mal llamados casuales.
La sensación que produce echar unas partidas a Bliss Island es la de estar ante un entretenimiento que funde varios conceptos. Por ejemplo, el billar. El modo en el que Hoshi, una especie de bola de peluche con trompa, empuja las esferas y, sobre todo, la táctica que hay que emplear para lograr carambolas o los propios ángulos de tiros nos remiten al juego del taco y el tapete.
En los 90 niveles de los que consta Bliss Island encontramos minijuegos donde debemos romper ladrillos, al estilo Arkanoid, o enlazar monstruitos de un mismo color... ¿He oído Puzzle Bobble? Pero lo mejor del caso es que las múltiples referencias a otras experiencias de juego no sólo casan bien, sino que se van sucediendo sin que tengamos la sensación de estar a los mandos de propuestas distintas con una leve excusa.
Un breve tutorial, porque saber controlar al bichito no lleva ni un minuto, nos conduce de pleno a niveles que empiezan con una dificultad infantil para ir derivando en cada vez retos más desafiantes.
Opinión usuarios sobre Bliss Island
por Anonimo
Es bastante infantil.
Es infantil, pero supongo que el público al que va dirigido son los niños. sin embargo creo que algunas pantallas será difícil para ellos
Pros: Aspecto atractivo para los niños
Cons: Nivel difícil para los niños en algunas pantallas Más